San No-Cobardín

Valentía. (De valiente). f. según la Real Academia de mi Lengua: Ausencia de cobardía. Pues nada, dicho esto os recuerdo que hoy dia 14 de febrero de 2008 es San Valentín (Ergo San No-Cobardín). :-) Según he leido hace poco, en estos tiempos convulsos que nos ha tocado vivir y en el que parece imperar el "todo vale", se está cuestionando si existió o no dicho Santo. Yo no lo sé pero lo que si tengo claro es que su "uso", y tal vez abuso, contribuye un año sí y otro también a fortalecer las relaciones amorosas de miles de parejas. Precisamente hoy al ir a comprar un ramo de rosas, para mi querida esposa, he podido comprobar cuan arraigado está la celebración entre la gente. En la floristería encontré una pequeña cola de caballeros, en exclusiva, esperando comprar las flores, pero al finalizar mi adquisición y salir del comercio había unos veinte caballeros esperando para hacer lo mismo que yo. En la floristería cuatro bellas señoritas se esforzaban, con amabilidad y una sonrisa encantadora, en realizar las pequeñas obras de arte con cualquiera que fuese la cantidad de rosas que se hubiran comprado. He visto pasar caballeros con una, dos, tres, cuatro, seis y hasta doce rosas. Había hombres trajeados, con corbata y maletín uno de ellos, con mono de trabajo, y vestidos de toda forma posible. El poder adquisitivo también se dejaba entrever y el numero de flores era proporcional al mismo, pero el porte con el que se salía con el ramo era exactamente el mismo en todos los casos. Me pregunté o más bien dicho intenté imaginarme a cada una de las destinatarias de aquellos objetos florales. ¿Cuantas de ellas lo estaban esperando? ¿Y deseando recibirlas? ¿Tal vez iban a quedarse cortos ante la posibilidad de que ellas quisieran otro tipo de regalo? Interesante tema, que a medida que se acercaba al momento de realizar mi compra mi imaginación se disparaba. Y me pregunte que cuantos de ellas iban a corresponder con otro detalle o regalo, porque da la sensación de que el santo solo influye y actua en una sola dirección. ¿O no?. Finalmente llego mi turno y la señorita me atendió con suma amabilidad y rapidez, y llegado el momento me miró y con el ramo terminado me pregunto: ¿Le pongo un "Te quiero"? Yo, que como muchas vees estaba absorto en mis pensamientos escuche solo parte de la frase y tal vez debido a ello o a mi forma de ser le contesté: "No, gracias le agradezco que me quiera, pero con una mujer me basta". Ella sonrió y me sacó del error, dado que lo que me estaba ofreciendo era una pegatina con el texto grabado dentro de un corazon y que decía "Te quiero". Sonreimos, ella, un servidor y la otra señorita que estaba en la caja esperando cobrarme. Pagado el importe, un pelín caro debido a la fecha, salí del establecimiento contento con mi compra y esperando, como así fue, recibir una sonrisa y un beso de mi esposa. Curioso eso de las fechas señaladas por imperativo social, pero he de confesarles una cosa, ya que normalmente en la pareja no nos prodigamos en caricias, besos y otros detalles que sirven para "endulzar" la relación y la vida, y si gracias a un santo que, al parecer, no existió y que careció de cobardía, hoy ha sido una noche, digamoslo, diferente aunque por rutina hayamos hecho lo mismo que cada día, y solo por eso ha valido la pena el ramo de rosas. Y un consejo, si se les ha olvidado, comprenlas mañana e inventen una excusa pero no dejen de regalárselas y no se arrepentirán. ¡Viva San No-Cobardín! salu2